Elogiar a alguien

Según estudios recientes publicados en la revista Personality and Social Psychology Bulletin, los participantes afirmaron sentirse más felices y halagados de lo esperado tras recibir un cumplido. Los elogiadores también declararon estar de mejor humor después de decir algo amable a alguien.

Los comentarios amables, cuando son demasiado generales, se quedan en eso: amables. Aunque no hay nada malo en ello, los cumplidos más atentos pueden hacer que las personas se sientan vistas y apreciadas por lo que son. Si quieres que tu cumplido tenga más peso, haz un esfuerzo adicional para hacer declaraciones auténticas que comuniquen matices y atención añadidos.

Si quieres alegrarle el día a alguien, aquí tienes algunos cumplidos significativos para todas las personas de tu vida. Ten en cuenta que, aunque algunas de las situaciones que se describen a continuación pueden ir dirigidas específicamente a una persona importante o a un familiar, puedes reformular el cumplido para que sea relevante para otra persona.

Cómo decirle a alguien que está bueno

Las relaciones son una parte importante de la vida de cualquier persona. Ya sean amigos, compañeros de trabajo o incluso alguien a quien acabas de conocer, es posible que sientas una conexión con una persona y quieras conocerla mejor. Pero puede resultar difícil averiguar cuál es la mejor manera de profundizar en la relación sin parecer precipitado o prepotente. Estableciendo interés, abriéndote a la persona y profundizando en la relación, puedes llegar a conocer mejor a alguien.

Si quieres conocer mejor a alguien, entabla una conversación desenfadada haciéndole preguntas informales, como “¿Tienes alguna mascota?” o “¿Qué te gusta hacer después del trabajo?”. A medida que hables con la persona, presta atención a lo que le entusiasma cuando habla, y hazle más preguntas sobre eso. Habla un poco con la persona cada vez que la veas y, a medida que se sienta más cómoda contigo, invítala a quedar contigo más a menudo. Sigue leyendo para conocer los consejos de nuestro asesor sobre cómo mantener una amistad platónica.

Cómo decirle a alguien que le aprecias

Una de mis citas favoritas es: “La vida es demasiado corta para no estar rodeado de gente agradable”. Cynthia Kenyon estaba en lo cierto cuando dijo esto. De todas las personas del mundo de las que nos podemos rodear, hay muchas amables.

Una persona genuinamente amable tiene un sinfín de grandes rasgos. Esto no quiere decir que siempre sean perfectas. Todo el mundo es humano y todos tenemos malos momentos. Todo el mundo puede ser amable y creo que ser amable es mucho más fácil que no serlo.

Las personas que son auténticamente amables muestran constantemente honestidad consigo mismas y con los demás. Sin embargo, se aseguran de hacerlo con tacto. Nunca tienes que preguntarte si te van a decir la verdad. Y, aunque las personas amables halagan a los demás, también son sinceras cuando se trata de críticas constructivas.

Todos sabemos que perdonar puede ser difícil, sobre todo cuando estamos muy dolidos. Sin embargo, una persona amable es comprensiva y se da cuenta de que las personas merecen una segunda oportunidad y, a veces, una tercera. Esto no quiere decir que los demás puedan pisotear a esa persona amable que también es una persona fuerte.

Cómo saber si alguien es una buena persona

Puesto que acercarse a la vida y a los demás seres humanos con el corazón y la mente abiertos puede dejarte vulnerable, ¿cómo puedes saber si alguien está siguiendo unas reglas que sólo le favorecen a él y no a los demás?

¿Cómo distingues tú, mi amable y confiado amigo -sabiendo y aceptando que la malevolencia existe en este mundo- a alguien que tiene buenas intenciones de alguien que sólo finge ser simpático para conseguir lo que quiere?

En lugar de culpar a los demás o evitar afrontar las consecuencias de sus actos, las buenas personas son capaces de asumir sus errores, aprender de ellos y cambiar su comportamiento para no cometerlos dos veces.

Saben que no viven en una isla y que todo lo que hacen -grande o pequeño- puede afectar a otra persona. Por eso tienen en cuenta las consecuencias de sus actos antes de hacer nada.

Los cotilleos son una sentencia de muerte para cualquier relación, personal o profesional, y una buena persona lo sabe, por lo que se mantiene alejada de participar en la difusión de falsedades, afirmaciones injustificadas y juicios negativos sobre los demás.