Luchamos constantemente con nuestra pareja
A menudo, la persona a la que más queremos es también con la que más acabamos peleándonos. Cuando pasas mucho tiempo con una persona, ésta aprende las partes más íntimas de tu personalidad. Ésta es una de las mayores alegrías de una relación, pero por desgracia también significa que tu pareja sabrá cómo provocarte emocionalmente, y viceversa.
Aunque la mayoría de las parejas sanas acaban discutiendo de vez en cuando, las peleas pueden llevar a la desaparición de una relación si se convierten en algo habitual. He aquí una serie de pasos que puedes dar para aliviar la tensión, sentirte más cerca de tu pareja y aprovechar al máximo el tiempo que pasáis juntos.
Cuando tienes un conflicto con tu pareja, es fácil que la pelea se eternice. Reproducir una discusión en tu cabeza puede parecer productivo como forma de reflexionar, pero a menudo te hará sentir infeliz durante más tiempo. Rumiar los sentimientos de ira hará más difícil perdonar a tu pareja a largo plazo y puede dar lugar a más peleas.
Cómo no pelearse en una relación
Si alguna vez has tenido una relación en la que tú y tu pareja estabais siempre a la greña, puede resultarte extraño encontrarte en una relación que no esté llena de conflictos. Puede que sientas que algo no va bien o que es demasiado bueno para ser verdad. Pero respira hondo: probablemente no tengas nada de qué preocuparte. Aunque es sano discrepar de vez en cuando en una relación, la ausencia de conflictos al principio de una relación es extremadamente normal. Además, es posible que tú y tu pareja os peleéis, pero de una forma tan sana y productiva que no lo parezca.
Según los psicólogos, hay aproximadamente 10 razones por las que las relaciones fracasan. Entre ellas están los problemas de confianza, las expectativas no cumplidas y la compatibilidad, por nombrar algunas. Las peleas constantes también pueden llevar a una relación problemática y, si no se gestionan bien, pueden acabar con la relación. Aunque pelearse en una relación es normal (¡nadie es perfecto!), hay formas de dejar de pelearse y manejar el conflicto con aplomo y comprensión.
Pelearse bien requiere tiempo y compromiso para llegar a la raíz del problema, sea cual sea. Si tienes una relación en la que peleas más que te diviertes con tu pareja, puedes estar seguro de que hay formas de dejar de pelear y disfrutar más el uno del otro.
Es normal y natural querer ponerse inmediatamente a la defensiva cuando estalla una pelea. Puede que te sientas atacado, agraviado o culpado por algo que no has hecho. Tomarse las críticas o declaraciones de tu pareja como algo personal sólo añade leña al fuego.
Puedes pedir disculpas, arreglar lo sucedido o simplemente preguntar cómo puedes arreglarlo. A menudo, no se trata de ti como persona, sino de lo que ha pasado. Sé receptivo a lo que la otra persona tiene que decir e interiorízalo, haciendo preguntas si es necesario.
¿Con qué frecuencia se pelean las parejas?
En las relaciones de pareja, los conflictos son inevitables. Pero no tiene por qué ser emocionalmente angustioso o cruel. Según los psicólogos, las parejas pueden estar en desacuerdo y, sí, incluso pelearse sin dejar de mostrar compasión y respeto por el otro. De hecho, según la psicóloga clínica Deborah Grody, las parejas casadas que no tienen ningún conflicto suelen ser las que acaban en divorcio. “Las relaciones que no pueden salvarse son aquéllas en las que la llama se ha apagado por completo o no existía desde el principio”, afirma. Según Grody, cuando uno o ambos miembros de la pareja se muestran indiferentes hacia su relación, no les importa lo suficiente como para pelearse.
Los conflictos acalorados e hirientes tampoco son saludables ni sostenibles. Usted puede tener conflictos con su pareja de una manera constructiva, y en realidad puede traer juntos más cerca. Los investigadores descubrieron que expresar la ira a una pareja romántica causaba el malestar a corto plazo de la ira, pero también incitaba a conversaciones honestas que beneficiaban a la relación a largo plazo.