Cerebro atascado en un bucle
Creo que la mejor manera de describir esta sensación es como caminar por la vida entre brumas. Todo lo que miras está borroso y distorsionado. Era incapaz de darme cuenta de mis victorias o de agradecer mis bendiciones porque un velo de negatividad cubría mis ojos.
Necesitaba cambiar de una mentalidad fija a una mentalidad de crecimiento, para entender que el pasado no tiene por qué repetirse y que yo tengo voz y voto en lo que ocurre si elijo aprender y crecer. Pero entonces no lo sabía.
La vida siempre estará plagada de dificultades. Es inevitable. Pero tener la resiliencia de decirte a ti mismo que todo va bien, que las cosas mejorarán, que tienes a gente que te quiere, que sabes que eres fuerte y, lo que es más importante, creer de verdad que tienes el valor y la capacidad de crear un cambio positivo en tu vida porque puedes seguir practicando la gratitud a pesar de tus dificultades… es algo que te da mucho poder.
¿Por qué estoy atrapado en un bucle de pensamientos negativos?
Cuando estamos en un bucle de pensamientos negativos, nuestra mente no está en el presente. Están ocupadas pensando en algo que ya ha ocurrido o que puede o no ocurrir en el futuro. Mindfulness nos ayuda a prestar atención a nuestro momento presente y a aceptarlo sin juzgarlo.
¿Cómo se rompe un bucle de retroalimentación mental?
Pero si “abandonas los pensamientos” y te permites simplemente sentir las sensaciones de ansiedad, el bucle de retroalimentación se rompe al instante. “Abandonar los pensamientos” significa pedirle al cerebro que deje de pensar por un momento y que, en su lugar, preste atención a lo que siente en el cuerpo.
¿Cómo se rompe un bucle traumático?
La TCC puede ayudar con los bucles de trauma ayudando al individuo a ser consciente de sus desencadenantes, sus respuestas y a trabajar sus respuestas emocionales a estas situaciones. Se pueden conseguir resultados mediante terapias individuales o incluso de grupo.
Bucles de pensamiento negativo
Básicamente, rumiar es pensar en algo una y otra vez. Es cuando tu mente se aferra a un tema y sigue dándole vueltas sin ningún propósito o beneficio real. Rumiar es agotador, estresante, una pérdida de tiempo y de recursos mentales.
La mayoría de los pensamientos rumiantes tienen que ver con cosas problemáticas, negativas o molestas. La rumiación es, en realidad, el cerebro encargado de resolver problemas y planificar, que intenta hacer su trabajo con demasiado entusiasmo. Si bien es cierto que estas habilidades de alto nivel de tu gran cerebro son esenciales para superar las dificultades de la vida, cuando rumias estás llevando estas capacidades ejecutivas al extremo. La gente suele pasarse horas rumiando sobre lo mismo sin ningún resultado productivo.
La rumiación es el intento instintivo del cerebro de resolver un problema, dar sentido a algo, cambiar una realidad que no estás dispuesto a aceptar o averiguar qué ha ido mal. La rumiación satisface al cerebro temporalmente porque le da algo que hacer respecto al problema, la situación inaceptable o las circunstancias problemáticas. En realidad, sólo está dando vueltas a las cosas, haciéndote sentir peor y sin conseguir nada útil.
Ansiedad por los bucles de pensamiento
Si nos decimos a nosotros mismos que no pensemos en un elefante rosa, el primer pensamiento que nos viene a la cabeza es un elefante rosa brillante. A los seres humanos nos intriga rápidamente aquello que se supone que no debería intrigarnos. Somos criaturas curiosas por naturaleza, aunque sepamos que las acciones que realizamos nos causan daño. Por desgracia, algunos de nosotros luchamos por controlar nuestros pensamientos en bucle. Nos decimos a nosotros mismos que no pensemos en algo, y entonces pensamos en ello. Los pensamientos en bucle suelen ser angustiosos y poco realistas. Nos hacen vivir con dolor y miedo.
El pensamiento puede ser real o imaginario, pero aun así no podemos dejar de pensar en él. Se repite en nuestra mente una y otra vez hasta que nos desesperamos por encontrar alivio. Entonces, ¿qué son exactamente los pensamientos en bucle y cómo podemos detenerlos? Esto es lo que sabemos. La psicología de los pensamientos en bucle. Un bucle de pensamientos recurrentes es una fijación en miedos, motivos o en cómo creemos que deberíamos haber actuado o no. Si bien los pensamientos en bucle son un biproducto del trastorno obsesivo-compulsivo (TOC), otras personas con ansiedad también pueden tener
Pensamientos en bucle
Estar atrapado en un bucle de pensamientos negativos puede pasar factura a tu salud mental. Puede hacerle perder el sueño y aumentar los síntomas de ansiedad y depresión. A veces, cuanto más intentas dejar de pensar, más fuertes se vuelven los pensamientos negativos. Detener el bucle de pensamientos negativos puede no ser fácil, pero es posible.
Un bucle de pensamientos negativos se produce cuando piensas en algo que te preocupa o te angustia una y otra vez y no puedes olvidarlo. Puede ser algo que dijiste o hiciste y de lo que te arrepientes profundamente, o algo que te dijeron o hicieron, o algo orientado al futuro o al pasado. Mientras rumias lo ocurrido, sientes los sentimientos relacionados con ello. Esto puede provocar síntomas de ansiedad y depresión cuando no puedes desprenderte de los pensamientos. Aunque cierta autointrospección es bastante útil y saludable, los bucles de pensamientos negativos no lo son. Esto se debe a que el cerebro no puede distinguir fácilmente entre lo que está sucediendo realmente y lo que le estás diciendo que está sucediendo. Cuando te centras en pensamientos negativos repetitivos, empiezas a juzgarte negativamente a ti mismo.